Las fiestas y tradiciones de un pueblo se muestran como clara expresión del carácter y valores esenciales que éste posee, así ocurre con nuestras gentes. Andalucía, tierra de frontera, ha sabido hacer de su arraigo popular una mezcolanza en la que dominan los extremos: la pasión, el colorido y la serenidad que jalonan nuestro calendario festivo, unas de carácter Mariano y otras de origen netamente pagano. Y es que la Semana Santa, las ferias y romerías, los carnavales o las corridas de toros entre otros festejos, son una buena excusa para perderse por nuestra geografía a, donde el viajero siempre encontrará las puertas abiertas